Para la presentación de la colección alta costura 2016/2017, Karl Lagerfeld produjo una réplica exacta de los talleres de costura de Chanel, ubicados en la famosa rue Cambon, al escenario del no menos famoso Gran Palais de París. Hacia allí se traslaron, además, todo el staff de costureros y el mobiliario de trabajo: escritorios, espejos, máquinas de coser, maniquíes, bocetos, telas, mesas, alfileres, metros, lápices, etc.
Un homenaje a las verdaderas petites mains, que realizan el valioso trabajo artesanal que implica el concepto mismo de alta costura. Las costureras se reparten en cuatro talleres: dos dedicados a la sastrería, y otros dos a la confección -a mano por supuesto, de los vestidos. Durante el desfile, las costureras pusieron en marcha sus pequeñas manos como si nada estuviera pasando ante la mirada incrédula de los asistentes que debían descubrir si eran actores o personas interpretando el verdadero papel de sus vidas.
“Detrás de las chicas del desfile, hay 200 más que realizan lo que ellas llevan puesto -eso es mucho, no? -y pensé que debíamos mostrarlas al público también." -Karl Lagerfeld.
Fotos Chanel; Pascal Le Segretain/Getty Images Europe.
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