“This couture collection celebrates the heritage and savoir-faire of Jean Paul Gaultier.” -Glenn Martens de Y/Project.
Glenn Martens es el último diseñador en dar un paso al frente, esta vez reinterpretando el universo de alta costura de Jean Paul Gaultier en una sola colección. El director artístico de Y/Project pone sus patas en la herencia de Gaultier, prestando su ojo agudo a las prendas llenas de referencias históricas y un encanto dramático.
“Rara vez tenemos la oportunidad de armar siluetas tan elaboradas. Para mí, alta costura significa pura belleza y elegancia. Looks que no tienen por qué estar en la calle” -Glenn Martens, director artístico y fundador de Y/Project.
¿Con qué casa de alta costura colaboró por primera vez Glenn Martens? Jean Paul Gaultier, por supuesto. En 2008, recién graduado de la Royal Academy de Amberes, comenzó su relación amorosa con el espíritu jovial y libre de la marca. Hoy, Glenn Martens celebra no tanto un descubrimiento, sino más bien un regreso a casa en la sede de la Maison.
Dentro de esta nueva colección de alta costura, el diseñador invitado Glenn Martens ha fundido la herencia de Gaultier y la ha fundido en la estética cruda de Y/Project. Sensual, atrevida y sexy, la mujer Gaultier se transcribe a través de la lente del modisto belga en siluetas surrealistas mientras convierte los icónicos trajes a medida, mallas y marineros de la marca en corsés que cubren los cuerpos como estatuas deificadas. Los estereotipos de Gaultier se reviven y refrito a través de nuevas técnicas, como la marinera que aparece en capas consecutivas de tul o múltiples hilos de encaje de terciopelo. Los trajes a medida de raya diplomática exaltan y transforman la figura, desnudándola y acentuando sus curvas. Las secciones recortadas de la cadera realzan la cintura, donde la firma "V" de Y/Project se sumerge en un bodysuit de estilo casual.
Las referencias a las estatuas góticas, tan queridas por el nativo de Brujas Glenn Martens, son omnipresentes. Haciendo alarde de telas de la Belle Époque, tonos carmesí victorianos, estampados estilo cota de malla y enaguas largas de terciopelo de estilo medieval, sus creaciones demuestran delicadeza sin exagerar. Adorando estas 36 siluetas hay una gargantilla con cuentas, corales plateados o granate bordados, cristales de retazos y broches tejidos antiguos. Cayendo en cascada como la cola de un vestido, los peinados voluminosos elevan aún más el efecto de los tacones altos. Todos sirven para desdibujar los límites entre los textiles y la forma humana.
Fotos Puig Comunicación.
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