En Francia muchos ven el final de una era de gasto desmedido en productos de lujo y el potencial comienzo a un regreso a las clásicas virtudes francesas como son la compostura y la modestia.
Y el genio detrás de Chanel tiene mucho que decir al respecto.
"Esta crisis es como esas grandes limpiezas de la casa en primavera -ambas moral y física," dijo Lagerfeld en una entrevista. "No hay evolución creativa sino hay momentos dramáticos como este. Se acabó la ostentación. Los vestidos para la alfombra roja con piedras preciosas artificiales no van más. Lo llamo 'la nueva modestia'."
Sin embargo, el Kaiser es rápido en aclarar que su casa está en orden, que los despidos anunciados este mes han sido sacados de proporción y que la colección Chanel Paris-Moscú, presentada el mes pasado produjo un 17% más en ventas que el desfile de París-Londres llevado a cabo en 2007.
Para los franceses, cada ola de malas noticias no hace más que traer mayor ansiedad. Cuando Chanel anunció recientemente el despido de 200 empleados temporales -sólo un poco más del 1% de sus 16,000 empleados-, el diario Le Parisien dijo que se trataba de una bomba inesperada. Mientras que el canal de televisión LCI describió el movimiento como un serio freno a tiempo de la compañía desde que Coco Chanel despidió a su staff entero y cerró su tienda cuando comenzó la guerra en 1939.
Y para Lagerfeld, poner un freno en sus propios gastos en Chanel no es parte de su estrategia de "nueva modestia". Dice que no ha sido forzado por los dueños de la compañía a adaptarse debido a las limitaciones financieras. "No tenemos un presupuesto delimitado, hacemos lo que queremos y tirar dinero por la ventana, trae más dinero a la puerta de entrada," señala con un juego de palabras. "El balance es que yo no tengo que lidiar con el balance. El lujo en mi vida es que nunca tengo que pensar en él."
Fuente: iht.com
miércoles, 21 de enero de 2009
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario