Ayer se estrenó el primer capítulo de Gossip Girl o La chica de los chismes, la nueva serie de los productores de The O.C. (Josh Schwartz) por el canal Warner. La primera muestra de la temporada nos dejó un pantallazo sobre de qué va la historia: adolescentes ricos, malvados y codiciosos del Upper East Side de Manhattan que van a la secundaria a pesar de parecer de 25 años, con padres inescrupulosos más ocupados en hacer parecer que dejar ser a sus herederos, historias de amor cruzadas, y lo que parece ser lo más intrigante, la chica popular y rebelde que regresa después de un viaje para –quizá- rehabilitarse, ocultar un embarazo (del novio de su mejor amiga), o vaya a saber qué cosa habría de ocultar. No falta el chico loser y pobre (y su hermana, casi abusada por Chuck) donde Pobre se entiende como tener un padre artista dueño de una modesta galería de arte; padre que, oh casualidad, tuvo un affaire al parecer no superado con la madre de Serena Van Der Woodsen, la chica a la que aspira conquistar su hijo, que asiste al mismo colegio que los chicos ricos.
La historia es relatada en off por Gossip Girl (Kristen Bell), una bloguera anónima que comenta en su página los secretos más ocultos de estos jóvenes. Los chismes comienzan justamente cuando Serena –la chica popular- regresa a la ciudad luego de haber desaparecido misteriosamente meses atrás. La autora Cecily von Ziegesar definitivamente leyó alguna vez “Menos que Cero” y “American Psycho” del gran Brett Easton Ellis porque viendo el primer envío no pude sacármelos de la cabeza, sobre todo el personaje de los malos Chuck Bass y Blair Waldorf.
En definitiva, luego de Beverly Hill 90210 y de O.C., Gossip Girl promete llenar el vacío con un poco más de lo mismo pero en versión reloaded: jóvenes lindos, colegios privados, sexo, drogas, limusinas, martinis y mucha, mucha envidia.
Horarios: jueves 23 hs, repite viernes 13hs, por Warner Channel.
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