Spencer Elden es el bebé que flota hacia el billete de 1 dólar en Nevermind (´91), álbum insignia del grunge patentado por Nirvana, ¿se acuerdan de las camisas leñadoras? Billie Jo Campbell es la nena que se asoma en la ventana en el disco debut de Violent Femmes (´82), que lleva el mismo título. Justine Ferrara, es famosa por haberse hamacado en el debut de Korn (´94). Carl Gellert, es el chico de la portada de A Boy Named Goo, de los Goo Goo Dolls (´95). Y, Lisa Farnsworth apareció en la tapa del debut de Lemonheads (´87) llamado Hate Your Friends, con su hermano David Peretz.
MTV.com estuvo con ellos, los ex niño/as que pasaron a la historia a través de las portadas de CD´s.
La historia cuenta que cuando los padres de Spencer dejaron a un amigo fotógrafo llamado Kirk Weddle que usara un rollo entero para retratar a su pequeño hijo en una pileta de cristal, jamás se imaginaron que, eventualmente, más de 9 millones de personas tendrían una foto de su hijo desnudo.
“Sí, es medio aterrador que tanta gente me haya visto desnudo”, dice Spencer. “Me siento la estrella porno más grande del mundo”. Desde entonces, Elden se ha convertido en (casi) una celebridad y a menudo lo llaman de la radio y la tv para hacerle entrevistas y preguntarle cosas sobre “la vida del bebé de Nirvana”. Spencer tiene 17 años, va a la secundaria Tagle Rock, en California y trabaja en un local de jugos, es decir, una vida de adolescente estándar (hasta que cuenta dónde solía nadar desnudo). Le gustaría ser piloto de avión, hace surf, snowboard y le encanta jugar al waterpolo.
“Es algo lindo saber que estuve en la tapa de un disco, pero me siento bastante normal al crecer, siempre sabré que yo era el bebé de Nirvana”, señaló Elden. “Nunca me condicionó como para decir ´Oh, ese soy yo en la tapa´. Siempre fue algo común. En ese momento, mis padres no sabían qué era Nirvana. Nadie sabía realmente quiénes eran. Y, de repente, despegó y sucedió que yo estaba en la portada del disco”, cuenta Spencer, a quien a menudo le piden que firme las tapas.
Elden se considera un verdadero fan de Nirvana aunque nunca conoció a ninguno de los integrantes de la banda. Tiene un disco de platino por Nevermind colgado en su habitación desde su primer cumpleaños. Sin embargo, Spencer no obtuvo nunca regalías por las ventas del album, y a sus padres les pagaron sólo 200 dólares por permitir que su hijo fuera fotografiado.
“Mi papa iba a la escuela de arte en Pasadena y tenía un amigo, Kirk, que es experto en demolición acuática que por asistir a la escuela de arte, dejó de bucear. Un día, él y mi mama estaban en una fiesta y mi mamá tuvo la idea. Él estaba diciendo cuánto extrañaba bucear, y ella le dijo, ´¿Por qué no hacés fotografía acuática?´ Cuando se graduó, lo primero que le surgió fue la tapa de Nirvana, y necesitaba un bebé. Entonces, me tiraron a la pileta y gastaron un rollo de fotos en un Segundo, y así fue todo”, relató Elden con naturalidad.
Por supuesto que ser “The Nirvana Baby” lo ayudó con las chicas. “Usé frases estúpidas como ´¿Querés ver mi pene otra vez?´, contó un sonriente Spencer que por el momento no parece tener aspiraciones de rockstar.
Vía: MTV.com
Traducción: DF
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